Cuando un grupo de ladrones provoca el caos en París y ridiculiza a la policía, el Ministro del Interior busca sangre nueva al frente de la investigación: Alia es de Marsella, temperamental e incontrolable, mientras que Hugo es parisino, meticuloso y el primero de su clase. En resumen, tienen todas las razones para odiarse. ¿Una alianza forzada o quizás algo más surgirá entre ellos?